Sin que suene el despertador antes de la hora programada para levantarse el día sábado en Bariloche los ojos se abrían solos, la adrenalina no permitía estar horizontal ni un segundo más. Era momento de levantarse y empezar el ritual previo a la carrera. Este varía en cada caso, controlar que todo el equipo esté que no falte absolutamente nada, disfrutando cada momento cada pensamiento nos va acercando a la largada y nos pone en clima. Un buen desayuno junto a corredores y colegas sonrisas mucha emoción y todo listo para ir a la carrera. Por la cabeza en ese momento solo hay deseos de correr y cumplir el objetivo.
Junto a 2200 personas entre las 4 distancias llegue a la base del Cerro Catedral para participar del Endurance Challenge de The North Face , unos 20 minutos antes de que sean las 8am hora de largada de los 50k, los que eligieron correr los 80k ya habían salido a las 4am. Los días anteriores había llovido mucho y no era muy alentador para los organizadores ya que tuvieron que realizar algunas modificaciones al circuito, las cuales fueron muy bien señalizadas y estuvieron listas a tiempo. El encuentro con mis compañeros de equipo es rush de energía extra, todos estábamos ahí listos para correr después de meses de preparación, después de los fondos, pasadas, cuestas y trote. El clima que siempre es bueno sin importar las condiciones climáticas es el de los minutos previos a la largada, es increíble gritos, saludos, risas, bromas y buenos deseos que se transmiten entre corredores, es uno de mis momentos preferidos es lo que siempre recuerda que correr es un deporte de camaradería y una fiesta,. Ya queda 1 minuto y el pulso se acelera miradas entre compañeros y el corredor que tenes a tu lado, miro hacia la montaña y empiezo a disfrutar el privilegio de poder correr hacia su cima. Cuenta regresiva y a correr!
La montaña nos recibió con un clima fresco y con algo de niebla. Salí a un ritmo suave y a los pocos metros empezamos a subir, subir y subir! Acomodarse iba a costar un poco más de lo esperado y el pulso subió rápidamente. La trepada era por un camino de ripio que nos llevaba hasta donde las aerosilas te dejaban desde la base del Cerro (la pregunta es: ¿por que no usamos una, no? :P). Desde ahi, tuvimos unas pequeñas pendientes y bajadas para luego meternos de lleno en senderos que bordeaban el Lago Gutierrez. No alcanzan los adjetivos para describir tan hermoso lugar que tiene nuestro país, Simplemente es impresionante la belleza del lugar, los colores, las texturas, la vegetación…TODO hacia que disfrute aún más el correr. El lago nos acompaño durante gran parte del recorrido brindándonos postales inolvidables. Esta parte del recorrido era ágil y de sendero cómodo para ir un poco más rápido, sumado a que fue entretenido ya que tenia pequeños puentes y altibajos. Así pasaron los primeros 10k muy rápidos. Pude charlar con algún corredor con el que hice algunos tramos y luego llegamos al primer puesto de control donde comíamos y reponíamos agua con la sorpresa de encontrar amigos en la asistencia.
Luego de reponer, subimos nuevamente por calles de ripio y senderos. Algunas de las pendientes eran suaves, pero otras demandaban mucho más de nuestras piernas. El clima mejoró y el sol se hizo presente (con lo cual mejoraron las condiciones para correr). Ya las as cuestas, por mas leves que fuesen, se empezaban a sentir cada vez más. Algunas cuestas se trotaban, otras un trekking fuerte y constante. En estos momentos la exigencia de la competencia se empezaba a sentir; 2900 metros de ascenso que aun no completaba en su totalidad hacían regular en las trepadas y en los descensos soltarse.Tuvimos luego de el ascenso el premio de pasar por El refugio de Arelauquen en el Cerro Otto que nos regalo una vista indescriptible, Nuevamente la naturaleza nos demuestra lo pequeños que somos, el respeto que hay que tenerle y lo importante de cuidarla. Y como se dice: “todo lo que sube, baja!!!” Empezamos a descender y el circuito nos hizo atravesar. Una de las bajadas más divertidas, para mi claro, pasando por tierra nada firme que demandaba mucha técnica y control al bajar. Cada vez que recuerdo ese momento me dan ganas de bajarla nuevamente.
Luego de descender todo lo que anteriormente ascendimos y entrando ya en los últimos 10km donde parecía que ya estábamos terminando la carrera nos encontramos con un desafío no solo para el físico si no para la cabeza, si ahora debíamos poner el entrenamiento la experiencia el corazón y Motivarnos con las personas que nos acompañaron para llegar hasta aquí ya que teníamos por delante una trepada de muchos km! La verdad es que el cansancio se sentía en las piernas y las pendientes las corría de a momentos y todo lo que podía, fue un momento difícil en el kilómetro 46 empecé a sentir como los músculos se contraían al límite de acalambrarse, pero pude sobreponerme y controlar los movimientos para que no se me acalambren del todo, los que más sufrían eran los cuadriceps (no se imaginan cuanto).
Fueron pasando los km, que se hacían largos porque eran todos en pendiente. Recuerdo que en este momento mis pensamientos para seguir trotando algunas de estas pendientes era el consejo de mi entrenador (Daniel Simbron) “trote suave tranquilo que se sube! el clásico tiki tiki!”. Hasta que llegamos a los arroyos y los cruzamos en varias oportunidades, fueron sin lugar a dudas una excelente previa antes de cruzar la meta, eso si el agua estaba heladaaaa! Y por momentos no sentí los pies.
Ya veía la meta, el arco de llegada esperando a que lo cruce, no había más cansancio, la mente enfocada en llegar a la línea de meta la adrenalina más fuerte que nunca y la emoción que te invade es incontrolable, el cuerpo se vigoriza se recarga de energía, la imagen de amigos familia y mis hijas me acompañan los últimos metros antes de Transformarme en Ultramaratonista de Montaña.
Fueron 05:36:01 horas para terminar los 50 kilómetros con 2900 Metros de ascenso positivo una competencia durísima que me dio un aprendizaje tremendo con un nivel de competidores muy alto. Sin lugar a dudas, una de las competencias más importantes en nuestro país.
Hoy, con un dolor en las piernas que es felicidad absoluta de poder disfrutar de la montaña, me encuentro dando el primer paso para lograr mucho mas.
A seguir corriendo
Find your trail.
Edu Basabe es el creador de http://findyourtrail.com.ar/
Corredor. 17 veces finisher en Maratón. Mejor tiempo 2:59. Lector enfermo de todo lo que sea running, curioso y siempre con ganas de aprender. Letra y podcast en Running Blog.